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BIBLIOTECA NACIONAL DE BIELORUSIA

Web Oficial de la Biblioteca Nacional de Bielorusia

La Biblioteca nacional de Bielorusia se configura como el mayor centro de referencia para todo el acervo cultural del país, está dotada de la tecnología más vanguardista, lo que le permite cooperar con otras redes telemáticas, se ubica en un edificio inteligente y que automatiza la mayoría de las funciones de transporte de la colección a las diversas salas (a base del uso de telelifts, única del país, en este sentido). Inmersa en la red científica y en la cooperación internacional, desarrolla actualmente diversos proyectos de digitalización y difusión de sus valiosos fondos.

El edificio diseñado por M. K. Vinogradov y V. V. Kramarenko llama poderosamente la atención. Es una alegoría del saber humanista, del empleo de la geometría y la vuelta a los principios vitruvianos de la arquitectura. Sobre la base de desarrollar tres circunferencias escalonadas en altura  (que albergan las salas de lectura y principales espacios públicos) domina el espacio dedicado al depósito de las colecciones (en 19 plantas), configurado como un rombicuboctaedro, uno de los 13 sólidos de Arquímedes, que magistralmente dibujó Leonardo da Vinci para las ilustraciones de la edición de 1509 de Luca Pacioli: De divina proportione. La simbología del edificio no acaba en el poliedro que lo corona, en su entrada hay dos pentágonos representados al modo del dibujado por Durero 1514, en su famosa Melancolía I.

Todo un hermoso y simbólico espacio arquitectónico edificado para la cultura.

Historia

La biblioteca fue fundada el 15 de septiembre de 1922 por decreto del soviet de la república socialista de Bielorusia, siendo al mismo tiempo biblioteca universitaria. I.B. Siomanovski fue director durante más de 40 años.

Era depósito legal de la URSS para los libros bielorusos.  Durante los años 30 y 40 la biblioteca se organiza abandonando sus funciones universitarias (1926) y añadiendo los anexos Vitebsk, Moguilev y Gomel. Sobre todo, un nuevo edificio diseñado por G. Lavrov abre en 1932 con una sala de lectura de más de 400 plazas, y más de un millón de volúmenes en almacén.  Toma entonces el nombre de Biblioteca Lénin.

En 1941, la biblioteca tiene una colección de 2  millones de volúmenes y acoje a 15000 lectores anuales.  Pero la mayor parte de las colecciones desaparecen tras la Segunda Guerra Mundial, y el edificio se abandona. Solo años después de la liberación vuelve a abrirse como biblioteca.

Tras la caída de la URSS, el 19 de mayo de 1992, la biblioteca toma el nombre de Biblioteca Nacional de Bielorusia.

La nueva biblioteca 

En 1989 se organiza un concurso para construir una nueva biblioteca, que es ganado por M.K. Vinogradov y V.V. Kramarenko, pero no es hasta 2002 que el Presidente de Bielorusia firma el decreto que decide la construcción del edificio.  Este último está situado en la avenida de La Independencia, principal arteria de Minsk.  A sus pies se encuentra un monumento en bronce en honor a Franzysk Skaryna, primer impresor bieloruso.

La biblioteca abre sus puertas el 16 de junio de 2006.  El edificio, de 74 m de alto, forma un rombobicuboctaedro.  Sus 19 salas de lectura están repartidas por los 22 pisos de la biblioteca.  Tiene inscritos 90000 lectores, consultándose cada año 3,200.000 obras.

La biblioteca tiene las funciones típicas de una biblioteca nacional. Se ha puesto en ella especial acento sobre las nuevas tecnologías para hacer, según el presidente Alexander Loukachenko, “un centro nacional de información y de cultura”.  Es también centro cultural, con un centro de congresos, cuatro galerías de arte y un Museo del Libro que cuenta con exposiciones permanentes y temporales.

El edificio alcanza una altura cercana a los 80 metros, posee 24 pisos y tiene capacidad para 2 mil usuarios.

Con menos de un año desde su creación, cuenta con 60 mil personas afiliadas que tienen acceso a casi 2 mil ordenadores dotados de Internet y de los programas más demandados.

 El depósito de libros ocupa 11 pisos, tiene capacidad para 14 millones de obras y está ubicado en la parte más alta de la estructura. Esta inusual ubicación responde a la necesidad de proveer a los libros de condiciones idóneas de humedad y temperatura que garanticen su preservación en el tiempo.

Actualmente, el almacén acopia 8 millones de libros en más de 50 idiomas.

   

De los títulos almacenados, 70 mil son obras raras que fueron rescatadas tras la II Guerra Mundial, entre las que destaca un original de la Torá, el texto de los primeros cinco libros de la Biblia judía.

 
Para preservar las referidas obras, la biblioteca cuenta con un museo del libro dotado, entre otros equipos, de un escáner de alta resolución que evita manipular el impreso, característica tecnológica que asegura la conservación del papel y previene la contaminación del operador.

 
Otra de las innovaciones es un monocarril aéreo que sirve para trasladar libros desde el depósito hasta cada sala donde éstos han sido solicitados. El novedoso sistema posee varios contenedores con capacidad para algo más de 60 libros (unos 10 kilos aproximadamente) e invierte sólo 20 minutos en transportarlos, desde el momento en que el título es requerido hasta que llega a la sala que lo solicitó.

 
Entre sus haberes tiene una galería de arte con obras de arte de reconocidos artistas bielorrusos e internacionales. Además, posee siete grandes murales que decoran sus espacios y representan las regiones en las que está dividida Bielorrusia.

Asimismo, posee una nutrida base de datos, catálogo en línea, edición de publicaciones impresas y audiovisuales, y establece vínculos con 11 bibliotecas nacionales del mundo a través del Ministerio de Relaciones Exteriores de Bielorrusia.

    Actualizado el 25/11/2009          Eres el visitante número                ¡En serio! Eres el número